Corregir el apiñamiento ayuda a prevenir caries y sarro
Más allá de la estética dental, puede causar problemas de confianza o autoestima en muchas personas, ya que afectan la estética e imagen al estar desalineados, torcidos o superpuestos generando inseguridad al momento de hablar con alguien o sonreír con normalidad. Pero también puede conllevar problemas a tu salud:
Dificultades en la higiene oral:
Cuando los dientes están apiñados, se dificulta acceder adecuadamente a todas las superficies dentales al cepillarse y usar hilo dental. Esto aumenta el riesgo de acumulación de placa bacteriana , que es una capa pegajosa y transparente compuesta por bacterias y restos de alimentos, también al de desarrollo de caries, enfermedades de las encías y mal aliento.
Maloclusión dental:
El apiñamiento puede ocasionar maloclusión dental, es decir, una mala alineación de los dientes superiores e inferiores al cerrar la boca. Esto puede causar problemas al masticar, hablar y respirar, así como dolor en la mandíbula y desgaste dental anormal.
Mayor riesgo de traumatismos dentales:
Los dientes apiñados pueden estar más expuestos a sufrir traumatismos, ya que pueden sobresalir o estar en posiciones inadecuadas. Esto puede aumentar la probabilidad de fracturas dentales o de que se aflojen o se caigan.
Dificultades en el tratamiento dental:
El apiñamiento dental puede complicar los tratamientos dentales, como la colocación de brackets o la realización de restauraciones dentales. Asimismo, los pacientes que utilizan alineadores invisibles pueden tener algunas dificultades de instalación o sentir mayor presión en las zonas que presentan mayor apiñamiento.
Es importante saber que el apiñamiento dental puede variar en gravedad, existiendo casos de leve, moderado a severo.
Formación de sarro:
La placa bacteriana que no se elimina adecuadamente se mineraliza con el tiempo y se convierte en sarro o cálculo dental. El sarro es una sustancia dura y amarillenta que se adhiere a los dientes, especialmente cerca de la línea de las encías. Su presencia favorece aún más la acumulación de placa bacteriana, ya que proporciona una superficie rugosa en la que las bacterias pueden adherirse con mayor facilidad.
Enfermedades de las encías:
Tanto el apiñamiento dental como el sarro aumentan el riesgo de desarrollar enfermedades de las encías, como la gingivitis y la periodontitis. La placa bacteriana y el sarro irritan las encías, lo que puede causar inflamación, enrojecimiento y sangrado. Con el tiempo, si no se trata, estas enfermedades pueden provocar daño en los tejidos de soporte de los dientes e incluso la pérdida de los mismos.
Es importante destacar que el apiñamiento dental no es la causa directa del sarro, pero puede contribuir a su acumulación debido a las dificultades para una limpieza adecuada. Por lo tanto, es esencial mantener una buena higiene oral, incluso si se padece apiñamiento dental, y visitar regularmente al dentista para una limpieza profesional y evaluación de la salud bucal.
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